TRIBUTO Y HOMENAJE A JIM ROHN. La muerte de un grande. La partida de una leyenda.

Con gran tristeza compartimos la noticia de que Jim Rohn, nuestro mentor y amigo, falleció el 5 de diciembre de 2009, para estar seguramente en un mejor lugar.

Cada día reflexiono sobre los beneficios y la transmisión de la sabiduría y las ideas que se originan en el mensaje de Jim Rohn. Lo extrañaré más allá de las palabras, pero me consuela saber que su mensaje y su legado vivirá para cambiar positivamente a millones de vidas a lo largo de los años que están por venir.


Durante los últimos 18 meses, en su batalla con una enfermedad terminal, Jim Rohn nos aseguró con una sonrisa que todo estaba bien, que lucharía hasta el último aliento, pero no tenía miedo de lo que vendría. La Fe de Jim Rohn era una parte tan importante de su vida, como su deseo de inspirar y desafiar a todos a ser lo mejor que pudimos ser y de vivir nuestros sueños.



El valor de Jim Rohn en los últimos meses y días fueron un testimonio del mensaje de que todos debemos luchar hasta el final. Nunca se dió por vencido y nunca se rindió.

En los últimos 46 años Jim Rohn tocó las vidas de millones de personas a través de sus seminarios, libros, artículos y CDs. Él siempre se quedaba mucho tiempo después de un evento para estrechar manos, tomarse fotos y firmar autógrafos. Le encantaba hacer una diferencia en las vidas de la gente, lo que era su pasión y su inspiración. Sin embargo, él también era un hombre privado, que mantuvo un pequeño círculo íntimo, leal y solidario. Era un gran amigo para quienes lo conocieron.

“Al mismo tiempo que Jim está terminando una vida, está empezando una vida nueva. Una vida de la que nos ha estado hablado en los últimos años y que él esperaba con gran alegría en sus últimos días”.

“Jim Rohn fue un gran ser humano. Jim tenía la rara habilidad de tomar cualquier concepto o idea y luego ponerlo en un marco, de tal manera que el resto de nosotros podía verlo con más claridad. Su sabiduría y conocimientos ha afectado positivamente a todo el que lo conoció de una manera u otra y para muchos de nosotros lo fue de una manera extraordinaria. Pero aún más impresionante fue Jim Rohn el hombre. Poseía estilo y carisma y sin embargo era humilde, amable y discreto para todos los que lo conocieron”.

“Jim Rohn era el hombre más influyente en mi vida, después de mi padre. Jim Rohn cimentó mi base filosófica y alimentó mi mente con ideas y ambiciones que nunca antes había imaginado. El moldeó mi carácter seminario por seminario, cinta por cinta, libro por libro, luego CD por CD, hora por hora. Jim Rohn me motivó a creer en mí y en mis sueños más atrevidos. Cuando me caí estaba allí con palabras de aliento que me ayudaron a levantarme. Cuando yo pensaba que no podía seguir, Jim Rohn me convenció de que yo era más fuerte de lo que yo mismo imaginaba. Cuando yo quería buscar un atajo, me recordó que no hay ninguno. Incluso cuando llegué a preocuparme demasiado al tratar de alcanzar el éxito, Jim Rohn me obligó a dejar un espacio para vivir, para reír y para amar”.

“Escuché por primera vez las filosofías y enseñanzas de Jim Rohn hace casi 25 años y causaron una impresión inmediata en mí. Me sorprendía cómo este hombre modesto y sin pretensiones podía comunicar un mensaje tan extraordinariamente potente en términos simples y directos. En persona, uno a uno, era tan humilde y con los pies en la tierra como cuando estaba en frente de una audiencia de miles de personas. Guardaré como un tesoro los recuerdos personales de Jim y sé que siempre me acompañará la sabiduría de este hombre notable”.