Una reciente investigación liderada por la doctora Carol Samuel, de la Universidad de Portsmouth, reveló que las personas que se someten a terapias de reflexología sienten aproximadamente 40% menos dolor a la vez que lo soportan por más tiempo (en 45%).
La reflexología es una técnica de medicina alternativa que aplica presión sobre determinadas áreas "clave" del cuerpo, principalmente manos y pies, para tratar diferentes padecimientos.
En el estudio, quince participantes atendieron a dos sesiones de tratamiento, en las que se les solicitaba que sumergieran sus manos en agua helada. En una de las sesiones, los pacientes fueron sujetos a una terapia de reflexología en los pies previo a la inmersión en agua, mientras que en la otra, se les hizo creer que se les estaba proporcionando alivio del dolor por medio de una máquina de Estimulación Nerviosa Eléctrica Transcutánea (ENET), cuando ésta en realidad estaba apagada (esto para estudiar el efecto placebo como posible variable).
Tras llevar a cabo las pruebas, los investigadores pudieron confirmar que la reflexología disminuía la sensación de dolor en los pacientes. Samuel piensa que ésta pudiera actuar de una manera similar a la acupuntura, provocando que el cerebro secrete químicos que disminuyen las señales que desencadenan el dolor.
Los resultados sugieren que la reflexología podría ser utilizada como un método complementario a los tratamientos convencionales así como en el tratamiento de osteoartritis, dolor de espalda y cáncer.
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